miércoles, 6 de junio de 2012

Para cortar con tanta tristeza.

Quizás Juli tenía razón, necesitaba dormir. Dormir mucho. Hoy me desperté a eso de las 12 y media, pero me quede hasta las 2 en mi cama a oscuras escuchando música. Me levanté un ratito y me volví a acostar. Estuve todo el día así. Y al principio me faltaban energías, esta en ese estado en el que suelo estar últimamente. Pero ahora, ahora estoy bien. Miré una película tapadita, todavía con el pijama, y me doy cuenta de que me siento mejor. Mucho mejor. Vi mi última entrada de ayer y sonreí porque me di cuenta de que hoy no tengo miedo. Hoy todo se siente en su lugar (dejando de lado que no tengo ganas de repasar matemática, y debería para la prueba, pero bueno). Me siento tranquila. Todo va a estar bien, y no lo digo por decirlo, ni porque es mi deseo, sino porque lo creo, puedo sentirlo. Y me pone contenta. Hacía mucho que no tenía un día de tranquilidad y pensamientos alegres. Y no es que todo eso que me hace mal diariamente haya mágicamente desaparecido, porque esas cosas están ahi, pero hoy ya no tienen una dimensión tan enorme. Veo que puedo manejarlo. Hoy no me afectan tanto. Estan ahí, como atrás de una vidriera de cristal, no pueden lastimarme. Quizás necesitaba un poquito de tiempo sola para no hacer nada y despejarme. Pero no importa qué, sino que hoy estoy bien.



O quizás fue el frío, quizás la luna...

No hay comentarios:

Publicar un comentario