viernes, 21 de diciembre de 2012

Nocturno


Frescor de los vidrios al apoyar la frente en la ventana. Luces trasnochadas que al
apagarse nos dejan todavía más solos. Telaraña que los alambres tejen sobre las
azoteas. Trote hueco de los jamelgos que pasan y nos emocionan sin razón.
¿A qué nos hace recordar el aullido de los gatos en celo, y cuál será la intención de los
papeles que se arrastran en los patios vacíos?
Hora en que los muebles viejos aprovechan para sacarse las mentiras, y en que las
cañerías tienen gritos estrangulados, como si se asfixiaran dentro de las paredes.
A veces se piensa, al dar vuelta la llave de la electricidad, en el espanto que sentirán
las sombras, y quisiéramos avisarles para que tuvieran tiempo de acurrucarse en los
rincones. Y a veces las cruces de los postes telefónicos, sobre las azoteas, tienen algo
de siniestro y uno quisiera rozarse a las paredes, como un gato o como un ladrón.
Noches en las que desearíamos que nos pasaran la mano por el lomo, y en las que
súbitamente se comprende que no hay ternura comparable a la de acariciar algo que
duerme.
¡Silencio! -grillo afónico que nos mete en el oído-. ¡Can¬tar de las canillas mal
cerradas! -único grillo que le conviene a la ciudad-.

Buenos Aires, noviembre, 1921.

Oliverio Girondo, 20 poemas para ser leídos en un tranvía.

lunes, 17 de diciembre de 2012

En defensa propia.

Dejar huella o no dejarla. Caminar de puntitas, siempre con un pie afuera y finalmente desaparecer sin dejar rastro. Recordar u olvidar. Ser una presencia efímera, irreconocible, olvidable. Aguantar. Desaparecer. Reaparecer en otro lugar muy alejado, muy diferente. Pasado distante. Presente expectante. Sueño reparador, melodía melancólica. Desapego ¿pérdida o limpieza? Llorar y reír. Dejar de analizar, de pensar, de sufrir. Tranquilidad, estabilidad,novedad. ¿Batalla ganado o perdida? Son dos caras de la misma moneda. El vaso medio lleno o medio vacío. Bien o mal. Duda. Seguridad. En defensa propia. Sí, es positivo. Ya no importa. No tiene punto.
Esta todo en mí, si lo dejo de pensar, deja de existir.